Ocho claves para superar el dolor, fue una charla en la Escuela de Filosofía Nueva Acrópolis en Almería. Los conferenciantes fueron su director, Jesús Márquez, y Daniel Iglesias. Entresacamos las ideas fundamentales. Existen diferentes tipos de dolor. Desde el físico hasta el más sutil. ¿Qué hacemos con el dolor? Analizaron a continuación algunos aspectos del dolor y algunos pasos para su comprensión.
«Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento». Victor Frankl, neurólogo, psiquiatra y filósofo austriaco superviviente de los campos de concentración de Auschwitz.
¿Qué es el dolor?
El dolor no es algo nuevo. El idioma sánscrito, uno de los más antiguos de la humanidad, utiliza varias palabras para indicar matices del dolor. Duhkha puede significar dolor físico, descontento, desilusión, tensión, vacío, angustia existencial, insatisfacción, etc. Biparinama se refiere al dolor psicológico en relación a la pérdida o el temor a la pérdida. Sanskara es más existencial: incomodidad o insatisfacción vital por no conocer el sentido de la vida.
El dolor es semejante, pero no homogéneo, no exactamente igual.
Aprender a distinguir entre el dolor y el sufrimiento. Dolor puede ser el impacto con una piedra. Pero sufrimiento es recrearse en ese dolor a cada paso.
El dolor es un mensajero. Es normal, por tanto, tener dolores, miedos, dudas, tristezas. No es normal que sean crónicos. Causas del dolor: la culpa, la soledad y el miedo a envejecer y morir. El dolor sirve para transformarnos y para transformar el entorno.
El dolor es algo natural en nuestra existencia. Luego indica algo de nuestro ser natural. Es algo propio, no algo externo. ¿El origen del dolor psicológico y mental está en las circunstancias, o sea, fuera de nosotros, o depende de directamente de nosotros, de cómo enfocamos las circunstancias? Como diría Epicteto, tendríamos que analizar qué parte depende de nosotros y qué parte no depende de nosotros.
¿Y cuáles son las causas de ese dolor? Básicamente, otorgar realidad a lo que no lo tiene. Identificarse con elementos externos, finitos. Apego a tales cosas. Están destinadas a perecer. La vida es ilusoria, el mundo es ilusorio. No porque no sean reales, sino porque son transitorios. Estamos apegados a las cosas, con las que llegamos a identificarnos de alguna manera. Así, llegamos a decir «se me ha roto el faro del coche».
Ocho claves para superar el dolor. Noble Óctuple Sendero
Solemos estar demasiado acostumbrados a las recetas. Las cosas requieren un tiempo, movimiento, un proceso, un sendero. La vida, en realidad, es un Sendero. Y este Sendero es noble: lo que es veraz, auténtico, sin dobleces. La cesación del dolor tiene más que ver con valorar las cosas que tienen que ver con el ser interior y agotar la «sed de vida». Sidharta Gautama, Buda, aporta ocho claves para superar el dolor. No son una receta, no son elementos secuenciales, sino que son valores que van unidos y se desarrollan de manera conjunta. Invitan al movimiento, algo tiene que cambiar en nuestra vida.
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- Recta visión o percepción
- Recto pensamiento
- Recta palabra
- Recta acción
- Rectos medios de vida
- Recto esfuerzo
- Recta atención o memoria
- Recta concentración
Si se percibe de una manera más profunda, más recta, se percibirá el mundo en mayor profundidad. La palabra es expresión del pensamiento. Por eso, la mayor riqueza del vocabulario enriquece el pensamiento. Recta palabra es no mentir, no ofender. No ser falaz, vacío. Recta acción es actuar sin pensar en el fruto o recompensa. Rectos medios de vida: no producir más dolor. Requiere esfuerzo salir de la zona de confort, traspasar los límites. Prevenir, destruir lo insano, construir lo sano que está por venir. Con atención se empiezan a barrer los límites y se desarrolla la memoria. Es estar despierto, vivo, presente. Se desarrolla una nueva visión interior. Es tener vida interior. Con altura: no ver tanto la forma y ver el fondo. Une todo lo anterior. Concentración es vivir desde el Centro. Llegar a un mundo mejor, a un Sendero de Vida.